El 15 de enero, será presentado mi décimo libro de cuentos. “Cuentos libres” es el tercero de la saga que componen, además, los volúmenes “Conciencia peregrina” (2022) y “Cien cuentos enanos” (2023). Cada manojo ha representado un reto para el autor, pues han conllevado determinadas exigencias, de contenido y de extensión, a las que debí sujetarme.
“Cien cuentos enanos”, el primero en concebirse y segundo en publicarse, ya lo anuncia su título, reúne minicuentos o cuentos brevísimos, en cantidad no antes publicada por autor alguno en República Dominicana. Todos los temas están presentes en esas cien narraciones breves.
Mientras que el segundo volumen, “Conciencia peregrina”, editado antes que el primero, contiene trece cuentos relativa_mente extensos, a propósito, y todos enfocan problemas de la conciencia que suelen afectar al ser humano, expresados en conductas fuera de lo ordinario. La parte espiritual, la psique, es lo predominante.
El maestro Julio Cuevas lo ha juzgado de este modo: “Se trata de una narrativa explicativa, descriptiva y apegada en este caso a un enfoque filosófico y psicológico…se abre a un discurso narrativo más apegado a la espiritualidad del ser, a los estados psíquicos del sujeto, a su conducta y forma de pensar”. (Publicado en Acento, diciembre 2022).
Cuando terminé de escribir el último cuento de “Conciencia peregrina”, sentí una liberación y me dije que el próximo libro de este género que publicara se titularía “Cuentos libres”. Estos, a diferencia de los otros dos, no han sido sometidos a exigencias temáticas ni de volumen. Puede decirse que de este libro nació primero el título, el cual fungió como una caja donde se van depositando cosas, a veces de la misma especie, otras veces, no.
En el caso de este libro, lo depositado en la caja encierra unidad: todos son cuentos y así aspiramos que sean recibidos y disfrutados por quienes hagan el favor de leerlos. Son veinticuatro cuentos de los temas más diversos, pero todos tocan al ser humano, como ente social, capaz de amar, de celar, de robar, de sufrir, fastidiar al otro o defender lo justo y lo bueno.
Son historias realizadas por personas de carne y hueso, poseídas, en consecuencia, de sentimientos, buenos o malos.
No me atrevo a afirmar, pues no es propio de mi perfil, que estos cuentos sean buenos. Me anima la esperanza de que sean ustedes quienes encuentren en ellos algún valor que los haga merecedores de ser leídos y recomendados a un amigo o pariente. Estaré complacido si así ocurriese.
rafaelperaltar@gmail.com
(El autor es periodista y escritor residente en Santo Domingo, República Dominicana).