Seis futuros sacerdotes serán ordenados mañana como diáconos. Tienen edad promedio de 35 años y todos pertenecen a la Diócesis de La Vega, cuyo obispo, S.E.R. monseñor Carlos Tomás Morel, presidirá la solemne ceremonia. Unos hombres sirven en el diaconado y permanecen de por vida. Deben tener esposa y medios de vida.
Estos varones virtuosos serán diáconos transitorios porque en este mismo año asumirán un compromiso mayor: recibirán el orden presbiterial. Lo de mañana tendrá lugar en la catedral Inmaculada Concepción, a partir de las 9:30 con la participación de otras autoridades eclesiásticas. Se han preparado para servir. Justamente diácono significa sirviente en su etimología griega.
Ellos, Isaías Pinales Ferrera, José Andrés González Checo, José Eduardo Reinoso Paredes, Leudis Manuel Frías Durán, Plinio Miguel Vásquez Encarnación y Roemil Fernández Tiburcio se incorporarán desde mañana al servicio de su Iglesia con el rango de diácono. Terminaron su formación en el Seminario Santo Tomás de Aquino.
Isaías Pinales Ferrera, constancero, nació el 7 de agosto de 1995. Es el segundo hijo de Francisco Pinales Suero y Carmen Ferrera. Pertenece a la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes, de Constanza. José Andrés González Checo nació el 10 de diciembre de 1991 en Las Lagunas de Cotuí. Es el sexto de siete hermanos. Hijo de Leónides González y la señora Teodora Checo María. Pertenece a la parroquia La Milagrosa, de Maimón.
El cotuisano José Eduardo Reinoso Paredes (16 de enero de 1986) es el menor de los siete hijos de Juana Bautista Paredes y Eduardo Reinoso (Fallecido). Natural de La Bija, Villa La Mata, Sánchez Ramírez, es Leudis Manuel Frías Durán, nacido el 6 de mayo de 1995. Junto a su hermana melliza, es el hijo menor de Leonardo Antonio Frías Brito y Jesusa Durán Suárez.
Plinio Miguel Vásquez Encarnación (10 de junio de 1989) en Las Guásumas, Villa Tapia. Es el séptimo de ocho hermanos. Hijo de Mercedes Encarnación y Justiniano Vásquez. En cambio, Roemil Fernández Tiburcio, de Cotuí, nació el 21 de mayo de 1984. Es el segundo de tres hermanos. Hijo de los señores Ramón Emilio Fernández y Rosalía Tiburcio.
“El que quiera ser grande entre ustedes, sea el servidor de todos”, esta advertencia del Maestro Jesucristo (Marcos 10, 43) es la divisa que orienta a estos ministros de los oficios divinos. El compromiso lo asumen voluntariamente. Saben lo que les espera. Oremos para que el Señor les dé las suficientes sabiduría y fortaleza y puedan ejercer digna y competentemente esta delicada función.
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(El autor es periodista y escritor residente en Santo Domingo, República Dominicana).