Pocos se han enterado de que la principal causa de las enfermedades es la mente y lo que «esta» nos hace pensar…
«Inventar la verdad», engañarse, creerse el cuento, no son aptitudes malas para el cuerpo siempre que «esas creaciones» sean para nuestro bienestar.
Un estudio social, realizado por la Universidad de Harvard, descubrió que, la enfermedad del cáncer, está ausente de pacientes psiquiátricos. Otro estudio recogió el testimonio de supervivientes de diversas tragedias e hizo «otro descubrimiento»…
El egoísmo, la capacidad de mentir y la aniquilación, sin culpa, del adversario. Fueron las conclusiones fundamentales de estos individuos que lograron superar los traumas de esas experiencias violentas.
Este tipo de egoísmo, no es el tradicional o el que todos entendemos, sino, uno más «auténtico». Se trata de «entender» que «tú» eres lo único que tienes y que para tener la capacidad de ayudar al otro, es menester que tú estés bien antes.
Nada del otro mundo que no se entienda. Si estás cojo, tendrás menos oportunidad de salvar a las víctimas de un carro incendiándose del que no lo está…
La capacidad de mentir, tampoco es lo que piensa la mayoría. No se trata de mentirle a nadie o de ser un mentiroso compulsivo, sino de mentirte a ti mismo. De no creerte lo enfermo que estás o que te haya dicho el doctor.
Si eres capaz de creer la mentira que te has creado, entonces tendrás la certeza de sanarte por ti mismo. Los milagros existen y están a nuestra disposición en nuestra cabeza…
Pero de estas tres conclusiones, la que, a mí, me parece más interesantes es la última; La aniquilación del adversario «sin culpa».
Tampoco se trata de matar a alguien, como estoy seguro de que estarán pensando, más bien se trata «de matar a la memoria»…
En mi libro «Patricio», todas las puertas, planteo el «vaciado memorial» como un santo remedio a los males de la vida, por lo menos de este personaje que de repente se ve librado hasta de el mismo… léanlo…
Aniquilar al adversario, es «apartar» cualquier rencor pasado, presente o futuro antes los «desprovistos» de la vida. Siempre nos acariciarán «los males», pero si arrastramos la culpa, nos jodimos.
Aspirar a una vida perfecta en donde «uno» sea un ser congraciado de virtudes y atributos que despierten la admiración de todos, es una aspiración difícil y engorrosa, además cargada de inquietudes y sobresaltos para el alma.
¡Sed locos! Pasaos por las nalgas a los chismosos y demás rayos que se os lancen. Aspirad al olvido y tratad de borrar todos los bichos que sacudan tu mente. Ya viste como a través del egoísmo, la mentira, la ausencia de culpa y «un buen manicomio» uno se muere «sanito»…
Todos los que participaron en el estudio de Harvard, fueron personas que superaron fuertes eventos inaguantables para la mayoría de los seres humanos, pero ellos, lograron superar e ir más allá gracias a las tres características ¡Sanas! Que escogieron.
Si usted no se las aprende, el mundo terminará por aplastarlo y en el mejor de los casos, volverlo loco. Eso por lo menos le garantizará que morirá de cualquier cosa, pero no de cáncer. ¡Salud! Mínimo Olvidero.
massmaximo@hotmail.com
(El autor es artista plástico dominicano residente en West Palm Beach, República Dominicana).