Santo Domingo (República Dominicana). Representantes de varias organizaciones solicitaron la remoción de la estatua de Cristóbal Colón, ubicada en el Parque Anacaona, durante una actividad denominada Parada Anti-Colonial Aquí No Lo Queremos.
A pesar de la presencia de policías y militares, y bajo la lluvia, los organizadores rindieron homenaje a la resistencia de los pueblos originarios, mientras el poeta Glaem Parls tocaba el mayohucan, acompañado de un flautista, y recreaban la música originaria.
Señalaron que también hicieron caso omiso a los «fascistas nacionalistas, amenazando, incidentando y diciendo que la actividad era realizada por fusionistas pro haitianos y gente de la LGBTI».
La artista norteamericana-dominicana Jehdy Vargas, del colectivo Strike Moma, presentó el performance «Descoloniza tu cabeza», para lo cual utilizó dos grandes telas, en una tenía dibujada la estatua sin cabeza del colonizador y Anacaona con cabeza en mano; en otra tela llevaba escrito «Colón Violador», consigna coreada por los asistentes a la actividad.
Aunque se tenía prevista una lectura colectiva del documento, que incluyera la tradicional palabras de la antropóloga e integrante de Guabancex Viento y Agua, Fátima Portorreal, la lectura fue realizada sólo por Maribel Núñez, y del público, el artista Yi-yoh Robles y otro de los participantes.
A continuación lo leído:
Manifiesto 12 de octubre, NADA QUE CELEBRAR: Aquí en el Parque Anacaona NO LO QUEREMOS!
12 de octubre, la memoria, la composición del genoma del cuerpo social que somos, también como sociedad cultural, adquiere mayor sentido, un día como hoy 529 años atrás hubo una invasión del hombre blanco europeo, el que se creía superior y representó un parte aguas para los pueblos originarios de ésta isla isla (Bohío, Babeque o Haití) y para todos los pueblos de Abya y años más tardes para el pueblo de mamá África, conocieron el irrespeto, la explotación, el racismo, la animalización, la esclavitud; defendiendo su humanidad, dignidad y su territorio alcanzaron hasta la muerte…
Reafirmamos que hubo resistencia, que en su totalidad nunca fueron vencidos, exterminados y que jamás serán olvidados, reafirmamos que nuestra presencia, es resistencia.
La conmemoración del 12 de octubre como el Día de la Raza, por parte de un Estado colonial que da continuidad, a un lenguaje de exclusión, ocultamiento y valorización de la cultura hispana invasora, nos dice claramente que tenemos la necesidad de descolonizar la memoria para descolonizar a la sociedad, de quitar monumentos en las plazas y ciudades, además de eliminar las narraciones racistas, xenófobas y discriminatorias con que se redactan los libros de textos escolares.
Se va descolonizando mientras se cambian los nombres a la plaza España por Plaza Caonabo o Guarocuya y al parque Colón por Parque Anacaona, se retiran las injustas estatuas: la del sanguinario comendador Nicolás de Ovando, y la del invasor Cristóbal Colón. Se descoloniza elevando la histórica y digna Anacaona, colocándola en lo alto, para que no esté jamás avasallada, a los pies del opresor.
Descolonizamos cuando conmemoramos el 12 de octubre como «día de la resistencia de los pueblos originarios» y no como «Día de la Raza», «de la hispanidad», o «encuentro de las culturas». Descolonizamos cuando la historia se cuenta desde el punto de vista de los oprimidos y se deja de referenciar la hispanidad como un buen legado y se narra sobre el genocidio e invasión. Cuando la resistencia se plasma como un continuum hasta descolocar los imaginarios y los procesos de dominación estatal.
Los pueblos originarios arahuacos y africanos son participe de lenguajes y acciones que manifiestan resistencia y presencia viva en la cultura isleña. Articulan caminos, promueven diálogos, construyen y recrean identidades, porque no estamos entumecidos de soledad, ni perdidos, olvidados o aniquilados. Formamos parte de un contingente de hombres y mujeres que saben, hacen y construyen futuro. Levantamos nuestras manos, recordamos, recuperamos y resistimos a las voces académicas, instituciones coloniales y personajes canallescos que defiende a un grupo, élite que se considera blanca, y única heredera de privilegios. Resistimos contra un modelo civilizatorio que se impuso brutalmente, contando con la soldadesca y gobernantes castellanos, un 12 de octubre de 1492.
Estamos aquí para reclamar a los «escépticos», intelectuales, gobernantes y a la oligarquía, que nosotros/as estamos vivos (vives) que abrimos «la boca» nombrando esperanza y exigiendo respuestas sobre los robos al erario público; reclamando: respeto a la naturaleza, a la soberanía, a la mujer y lo que ocurre en su cuerpo, a la niñez, a la tierra, vivienda digna en suelo habitable sin discriminaciones, detener los desalojos, el derecho al agua limpia, a tener comunidades que reconozcan su riqueza cultural y a una biodiversidad sana, garantía de todos los derechos humanos, reclamamos el cese de la explotación minera de la Barrick Gold. Reclamamos una memoria que no segregue por color de piel, país de origen, religión o diversidad de pensamiento o elección sexual.
Estamos aquí diciéndote que somos senderos de futuro y nunca más olvido.
Firmado en Santo Domingo, República Dominicana el 12 de octubre del 2021:
Guabancex Viento y Agua, Acción Afro-Dominicana, Cooperativa de Producción Social de la Vivienda y el Hábitat (COOPHABITAT), El Grito de los Excluidos, Museo de la Dignidad, Desalojo Cero, Comité Dominicano de los Derechos Humanos (CDDH).
Comentarios sobre post