Por Scott Merkin
Arizona (MLB).- Durante muchos juegos de pretemporada, no se mide la distancia de los jonrones de manera oficial. Por lo tanto, juzgando por dónde cayó en el bosque izquierdo, se estima que el prodigioso batazo de Yermín Mercedes en el Camelback Ranch el lunes tuvo una trayectoria de aproximadamente 480 pies.
Pero lo que sí dejó claro dicho bambinazo fue el poder del dominicano de 27 años, uno de cinco receptores en el roster de 40 de los White Sox ahora mismo.
“Voy a batear duro en las prácticas y en el juego también”, expresó un Mercedes sonriente. “Nunca cambio mi swing”.
Los remodelados White Sox, que a lo mínimo aspiran a competir por el título de la Central de la Liga Americana a medida que terminan la primera fase de su reconstrucción, tienen que decidir quién llenará el 26to puesto en el roster de Grandes Ligas. Mercedes es uno de los candidatos.
“Ha hecho un buen impacto en la organización desde que llegó”, dijo el capataz de los White Sox, Rick Rentería. “Ha evolucionado; ha madurado hasta el punto de que a la organización le agrada lo que está haciendo ofensivamente. Viene haciendo un buen trabajo y es bastante bueno recibiendo [detrás del plato]. Es el paquete completo y ojalá siga teniendo una buena pretemporada”.
Dijo Mercedes: “Simplemente estoy haciendo mi trabajo aquí, trabajando duro todos los días. Espero que los White Sox me den la oportunidad de ser el 26to jugador en el roster”.
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