Redacción (RT.com).- El secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, fue sometido a una cirugía en diciembre para tratar y curar un cáncer de próstata, informaron funcionarios médicos militares en un comunicado emitido por el Pentágono este martes
«Estuvo bajo anestesia general durante este procedimiento. El secretario Austin se recuperó sin incidentes de su cirugía y regresó a casa a la mañana siguiente. Su cáncer de próstata fue detectado tempranamente y su pronóstico es excelente», se lee en el reporte del Centro Médico Militar Nacional Walter Reed de Bethesda (Maryland, EE.UU.).
A Austin, de 70 años, se le practicó una prostatectomía días después de ser ingresado en la institución médica, el pasado 22 de diciembre. Posteriormente, el 1 de enero, fue hospitalizado nuevamente tras experimentar complicaciones propias de la intervención quirúrgica, «que incluían náuseas con dolor intenso en el abdomen, la cadera y las piernas».
Los médicos descubrieron que tenía una «infección del tracto urinario» y al siguiente día fue trasladado a una unidad de cuidados intensivos para «una vigilancia estrecha y un mayor nivel de cuidados».
Durante el periodo que permaneció en Walter Reed para tratar la infección, que finalmente fue curada del todo, «nunca perdió el conocimiento» ni tampoco fue sometido a «anestesia general».»[Lloyd Austin] sigue progresando y prevemos una recuperación completa, aunque puede ser un proceso lento». subraya el comunicado médico.
Hospitalización secreta
El Pentágono mantuvo en secreto la hospitalización de emergencia de Lloyd Austin el 1 de enero. Ni el presidente estadounidense, Joe Biden, ni el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, ni otros altos funcionarios de la Casa Blanca estaban al tanto de la situación. La información fue de conocimiento público hasta el 5 de enero mediante un comunicado del portavoz del Pentágono, Pat Ryder.
El ocultamiento de la hospitalización de una figura clave de la política militar estadounidense generó fuertes críticas contra el Departamento de Defensa en la opinión pública, así como entre funcionarios. Ryder había explicado en ese entonces que se decidió ocultar la situación luego de considerar «una serie de factores, incluidas cuestiones médicas y de privacidad personal».
Al respecto, en la actualización sobre su tratamiento y su condición conocida hoy, se señala que «las discusiones sobre detección, tratamiento y apoyo suelen ser profundamente personales y privadas».
El pasado 6 de enero, Austin comentó la situación en torno a su hospitalización y reconoció que «podría haber hecho un mejor trabajo garantizando que la opinión pública estuviera adecuadamente informada». Al mismo tiempo, dijo que asumía toda la responsabilidad por las decisiones tomadas sobre la divulgación de información sobre su procedimiento médico.