Roma (FAO Noticias).- Esta semana, Rein Paulsen,Director de la Oficina de Emergencias y Resiliencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), junto con Adoniram Sanches, Coordinador Subregional de FAO en Mesoamérica, visitaron Haití para apoyar al nuevo Representante de la FAO, Pierre Vauthier, en el fortalecimiento de la cooperación internacional y en aumentar la conciencia sobre la grave situación humanitaria en el país
Durante su visita, los funcionarios de la FAO se reunieron con el Primer Ministro Garry Conille, así como con el Ministro de Agricultura Vernet Joseph y el Ministro de Medio Ambiente Moïse Fils Jean Pierre. También sostuvieron reuniones con representantes de USAID, el Banco Mundial, la Unión Europea y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), además de otras agencias y programas de la ONU.
Alarmante inseguridad alimentaria en Haití
Desde febrero de 2024, el aumento de la violencia y el desplazamiento de la población han reducido significativamente la producción agrícola y han interrumpido los mercados, dejando a la mitad de la población de Haití inseguridad alimentaria aguda. Cerca de cinco millones de personas están experimentando altos niveles de inseguridad alimentaria aguda, y aproximadamente 125,000 niños sufren de desnutrición aguda severa. La FAO hace un llamado a la comunidad internacional para asegurar 48 millones de dólares bajo el Plan de Respuesta Humanitaria 2024, con el fin de asistir a 608,000 personas a través de actividades agrícolas de emergencia.
«La FAO mantiene su compromiso de proporcionar apoyo agrícola urgente para las próximas temporadas de siembra, pero se necesita financiamiento adicional para salvar vidas, prevenir el hambre y la hambruna, y ayudar a las poblaciones vulnerables a restaurar sus medios de vida en medio de una violencia y desplazamiento sin precedentes», dijo Rein Paulsen.
Prioridades de la FAO
La FAO ha demostrado que la producción local de alimentos y el acceso a semillas son soluciones sostenibles y rentables, esenciales para prevenir una crisis alimentaria mayor. Un análisis del Hub de Datos en Emergencias de la FAO subraya que las actividades agrícolas ofrecen una protección contra la violencia y la inseguridad, permitiendo a las familias rurales producir sus propios alimentos.
En las poblaciones urbanas, periurbanas y rurales afectadas por la crisis en el Área Metropolitana de Puerto Príncipe y el departamento de Grand’Anse, la FAO tiene como objetivo mejorar el acceso y la disponibilidad de alimentos para los hogares vulnerables. La agencia especializada de las Naciones Unidas planea apoyar a las familias desplazadas y de acogida mediante transferencias de efectivo, combinando estas con paquetes de insumos agrícolas y capacitación. Este enfoque permite que los hogares afectados por la crisis satisfagan sus necesidades inmediatas, mientras participan en la producción de alimentos para el consumo doméstico y la generación de ingresos, así como mantener sus activos productivos. Dependiendo de las circunstancias locales, los beneficiarios pueden recibir efectivo, insumos agrícolas, capacitación o una combinación de estos tipos de asistencia.
Visita de campo a Grand’Anse
Ante los alarmantes niveles de desnutrición aguda, particularmente en regiones como Artibonite y el Área Metropolitana de Puerto Príncipe, la FAO también está enfocada y preparada para proporcionar asistencia nutricional a más de 276,000 niños en riesgo de desnutrición. Sin embargo, sin un aumento significativo en la financiación, los esfuerzos de la FAO para mitigar esta crisis humanitaria se verán gravemente comprometidos, afectando la supervivencia de cientos de miles de personas.
Durante su visita de campo, Paulsen y Sanches, acompañados por el Embajador de Canadá, André François Giroux; la Subembajadora de los Estados Unidos, Usha Elizabeth Pitts; y el Director General del Ministerio de Agricultura, Moise Elancie, supervisaron los resultados de iniciativas clave anteriores de emergencia y resiliencia, específicamente en cadenas de valor clave como la producción de leche, así como la producción de vegetales, ganadería menor y el programa de alimentación escolar en la comuna de Marfranc.
La agricultura sigue siendo un salvavidas crítico para el 75% de las personas afectadas por la inseguridad alimentaria en Haití. Proporcionar a los hogares afectados por la crisis, incluidas las personas desplazadas internamente y las comunidades de acogida, apoyo agrícola de emergencia urgente es esencial para su supervivencia, aumentar la producción de alimentos y restaurar sus medios de vida. Sin embargo, la falta de financiamiento sigue siendo un obstáculo crítico. El costo de no actuar es alto, ya que la población afectada será más vulnerable y necesitará más asistencia humanitaria. No invertir ahora en emergencias agrícolas y resiliencia costará más.
La evidencia de las intervenciones de la FAO en 2023 muestra que una inversión de 480 USD puede apoyar a una familia de cinco personas para cultivar alimentos básicos durante hasta seis meses, y una inversión de 200 USD proporcionó 100 gramos de semillas, lo que permitió a los hogares producir un promedio de diez tipos diferentes de vegetales nutritivos, valorados en aproximadamente 2,500 USD en el mercado local.