Las figuras históricas, destacadas en nuestras luchas patrióticas, y por igual aquellas que representan íconos de la dominicanidad, si bien representan herencias de todos los dominicanos, algunas son asumidas por localidades que las tienen como suyas. Así, Gregorio Luperón, héroe de la Restauración, dispone en Puerto Plata de un culto especial.
En Moca, Ramón Cáceres es un auténtico padre de la patria, pero en Santiago, los otros lideres de la Guerra Restauradora (Imbert, Gaspar Polanco, Salcedo, Espaillat…) son objetos de particular devoción. De La Vega es la Virgen de las Mercedes, mientras la Altagracia, de veneración nacional, tiene en Higüey privativo nicho de simpatía.
El Seibo se ha quedado con Pedro Santana, héroe y traidor, y para mejorar su imagen cuenta con la única estatua de doña Manuela Díez, colocada en el punto más visible de la ciudad. Del vientre bendito de doña Manuela proviene Juan Pablo Duarte, como también Vicente Celestino y Rosa, entes esenciales para lograr nuestra Independencia.
Azua, una de las cinco provincias nacidas con la fundación de la República en 1844, tiene suficiente historia que mostrar, pues ha actuado en momentos estelares.
Los azuanos reclaman como suyo el historial del cacique taíno Guarocuya, quien al convertirse al catolicismo pasó a llamarse Enrique y es conocido por el hipocorístico Enriquillo.
Enriquillo libró una guerrilla contra la dominación española, hastiado por los abusos de los conquistadores contra los de su raza.
Por eso, este miércoles 27 será festejado el Día de Enriquillo y el centro de las festividades se ubicará en Pueblo Viejo, territorio de la provincia de Azua, donde inicialmente se fundó Compostela de Azua. Por segundo año consecutivo, autoridades y gestores culturales azuanos acudirán, desde las 9 de la mañana, a las ruinas de la Iglesia las Mercedes, del citado municipio, a mostrar admiración por Enriquillo.
La actividad es promovida por el inquieto Julio Lorenzo Merán, de conformidad con una decisión del presidente Abinader.
El 3 de diciembre de 2021, el mandatario firmó el decreto 783-21, mediante el cual declaró el 27 de septiembre como Día de Enriquillo. Además, Abinader ordenó a los ministerios de Educación y Cultura, y la Comisión Permanente de Efemérides Patrias conmemorar esta fecha, aniversario del fallecimiento del cacique.
Para ello, el Presidente consideró, entre otras razones, que Enriquillo es el máximo símbolo de la resistencia en América, por su lucha contra la acciones genocidas, opresoras y abusivas de los colonizadores contra los tainos y esclavos de origen africano. Los azuanos han tomado para ellos este mandato porque sienten que Enriquillo es de Azua.
rafaelperaltar@gmail.com
(El autor es periodista y escritor residente en Santo Domingo, República Dominicana).
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