Santo Domingo (República Dominicana).- El sistema penitenciario en la República Dominicana se encuentra al borde del colapso y los privados de libertad, alrededor de 28 mil, están en peligro por la pandemia del Covid-19, aseveró la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH-RD).
En un informe sobre la situación penitenciaria en el país bajo la epidemia del Coronavirus, la CNDH-RD destaca que aún persiste el hacinamiento en los 36 centros carcelarios distribuidos en las 32 provincias en las que se divide República Dominicana, lo que representa un peligro para esa población ante la propagación del Covid-19.
Cerca de 200 confinados han dado positivos a la prueba de Coronavirus.
Señala que si bien el sistema carcelario dominicano se había encaminado hacia una profunda reforma con la puesta en marcha del Nuevo Modelo carcelario, citado como ejemplo a seguir para la región por las Naciones Unidas y por la Unión Europea, que en parte lo han financiado, «a la fecha de hoy tenemos que resaltar que el proceso de implementación de los nuevos modelos se ha estancado y que la construcción de nuevas cárceles se ha paralizado».
Destacó que esos 36 centros tienen una capacidad para unos 15 mil internos y en la actualidad albergan a alrededor de 28 mil privados de libertad, de los cuales más de 13 mil viven en un gran estado de hacinamiento y en condiciones infrahumanas, «violándoles todos sus derechos humanos establecidos por las reglas mínimas de las Naciones Unidas para el tratamiento de los reclusos, la Constitución dominicana y la Ley número 224 sobre Régimen Penitenciario».
Agrega que de estos 28 mil internos un total de 12 mil se encuentran en el nuevo modelo y el restante 16 mil
en el viejo modelo.
«En la actualidad el sistema penitenciario de la República Dominicana está al borde del colapso porque el Estado no contempla ampliar la reforma penitenciaria a través del Nuevo Modelo de gestión penitenciaria que en estos momentos como decíamos luce estancado por la falta de recursos económicos para la construcción de nuevos centros», expuso la CNDRD.
Argumentó que el viejo modelo está concebido como un mercado, donde todo se vende y se compra, «y que se puede decir que sigue siendo un cementerio de hombres vivos. En esas cárceles falta de todo, espacio físico, alimentación, atención médica, medicamentos, agua, higiene, y donde el hacinamiento es horrible».
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH-RD) recordó que preocupada por esa situación y por la posible propagación de la Covid-19 en las cárceles del país, el 24 de marzo del 2020, dirigió una solicitud al presidente de la República Danilo Medina Sánchez, y al procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, solicitándoles la adopción de medidas URGENTES a fin de descongestionar las cárceles del país en vista de la epidemia de SARS-CoV-2.
Dijo que en la ocasión solicitaron: a) Indulto humanitario y masivo a todos los internos en las cárceles públicas del país con enfermedades terminales, previo cumplimiento de las formalidades de Ley; b) Indulto humanitario y masivo a todos los adultos mayores de 60 años en las cárceles públicas del país, previo cumplimiento de las formalidades de Ley y, c) Libertad pura y simple a todos los internos con medida de coerción consistentes en pago de una garantía económica, previo cumplimiento de las formalidades de Ley.
También solicitaron: d) Libertad para aquellos que están presos por multas, previo cumplimiento de las formalidades de Ley; e) Libertad para aquellos que están privados de libertad por trámites burocráticos, previo cumplimiento de las formalidades de Ley; f) Libertad para aquellos presos que le faltan solo meses para cumplir su condena total, previo cumplimiento de las formalidades de Ley; g) Libertad para los presos que ya han cumplido ¾ de la pena total, previo cumplimiento de las formalidades de Ley, y de los encarcelados por delitos menores, previo cumplimiento de las formalidades de Ley.
Destacó que planteamientos similares fueron hechos por organismos internacionales de derechos humanos, y la Organización de las Naciones Unidas, solicitudes que fueron acogidas por algunos gobiernos como Irán y Turquía, que han liberado a miles de detenidos.
De acuerdo con la CNDHRD, las medidas tomadas por las autoridades en el sistema penitenciario ni han sido suficientes ni urgentes.
La comisión está integrada por el licenciado Roberto Santana (presidente de la Academia Regional Penitenciaria); Fray Arístides Richardson (coordinador de la Pastoral Penitenciaria); el magistrado Rafael Báez (Tribunal Contencioso Administrativo) y el presidente de la CNDH-RD, doctor Manuel María Mercedes.
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