Por Jhonny Trinidad
Nueva York.- El caso del artista urbano «Rochy RD», a quien un tribunal de la República Dominicana impuso este domingo tres meses de prisión preventiva por un supuesto abuso sexual de una adolescente de 16 años, es el resultado de una mala crianza, a juicio del psicólogo dominicano Henry Montero.
«Este es un fenómeno ascendente, preocupante y que no se produce solamente en la franja adolescente. Tenemos constancia de que se están produciendo agresiones, incluso con niños de 8 o 9 años que golpean a sus padres», reveló Montero, quien lleva años ayudando a menores y a sus familias-a solucionar problemas de agresividad y «malas crianzas».
El profesional de origen dominicano considera que la mayoría de esos problemas son el resultado de una mala educación.
«En algunas situaciones hay niños que tienen una patología, pero en la mayoría de los casos se trata de una mala educación», subrayó Montero.
«Los padres no saben educar a sus hijos. Y no es solamente eso, es que los educan mal. Ese fenómeno se produce porque se consiente al hijo, se le da todo lo que quiere, existe una falta de pautas educativas correctas. No se están poniendo límites. No existe una autoridad que dicta lo que se hace y lo que no se hace», indicó.
El psicólogo dominicano agregó que «si a eso sumamos la televisión y los modelos inadecuados que se están produciendo, el resultado es precisamente lo que está pasando con ese joven artista conocido como Rochy RD y su compañera sentimental, conocida como La Demente 1212, quien es perseguida por las autoridades ya que, supuestamente era la encargada de reclutar a jóvenes con las que el cantante mantenía relaciones sexuales».
Aseguró que «los padres se dan cuenta de las malas actitudes de sus hijos, lo que pasa es que no lo quieren ver. Hay casos de padres que dicen ‘no puedo con mi hijo’ y lo dejan así porque se hacen la ilusión de que eso se le pasará con el tiempo. Pero eso no sucede».
«Ese tipo de negligencia de los padres hace que la situación se vaya deteriorando. El niño cada vez va ganando más fuerza y, en esa medida, los padres lo van perdiendo», explicó el especialista de la conducta.
Montero indicó que «esa situación, a la que no se pone un límite claro, termina produciendo un proceso de coerción, en el que el menor cada vez grita más y el padre va gritando cada vez menos».
«Los adolescentes no quieren obstáculos ni pautas, solo buscan su autosatisfacción», manifestó Montero en el programa «Levántate NY», que produce Rafael Díaz Cepín, y que se transmite por Youtube, Facebook, Instagram y Twitter, donde fue entrevistado por Niurka Rivera, Providencia Rosi y Oscar Pérez.
Advirtió que «esos casos requieren de terapias de tipo familiar y la implicación de todos».
Comentarios sobre post