Santo Domingo (República Dominicana).- El expresidente del Instituto de Auditores Internos de la República Dominicana, Inc. (IAIRD) exhortó al presidente Luis Abinader, convocar a la clase política dominicana a una gran cumbre.
Juan Ovalles considera que el objetivo de la convocatoria sería sentar los lineamientos de las bases para romper con la cultura en muchos aspectos fundamentales del no cumplimiento de la Constitución y las leyes en la República Dominicana.
El profesional consideró que con la reciente juramentación de Abinader el país podría tomar un nuevo rumbo, ya que prometió durante la campaña que su gestión al frente de la Administración Pública se caracterizará por ser honesta, transparente e institucional.
El experto en Control Interno precisó que el momento no puede ser más oportuno para que convoque esta cumbre y se invite además de la clase política.
Destacó que en la convocatoria se debe incluir empresarios, representantes de las principales organizaciones de la sociedad civil, sindicatos, gremios profesionales y rectores de las diversas universidades para hacer este compromiso conjunto ante el pueblo dominicano.
Resaltó que el Sistema de Control Interno Gubernamental no funcionará de manera efectiva en la República Dominicana, hasta tanto exista una férrea voluntad de las máximas autoridades ejecutivas de los tres Poderes del Estado Dominicano, para cumplir y exigir a todos los funcionarios públicos de todos los niveles el cumplimiento legal y efectivo dentro de sus funciones y responsabilidades.
Resaltó la necesidad de otorgándoles a todos los empleados públicos todo el apoyo, la libertad y seguridad para que hagan su trabajo, sin que reciban interferencias de ningún estamento o funcionario superior y si las reciben, el funcionario o empleado debe tener la garantía legal para hacer la denuncia sin que pueda ser sancionado o cancelado por hacer lo que es correcto.
Indicó que los altos niveles de corrupción que denunciados histórica y permanentemente en cada gestión gubernamental desde la fundación de la República, se deben básicamente al no cumplimiento estricto de las leyes en el país y a la falta de consecuencias para castigar a los infractores de las leyes, que impide que el país logre mayores niveles de desarrollo, eficiencia y pulcritud en el manejo de los recursos públicos.
Expresó que cada año Transparencia Internacional, entidad que mide anualmente los niveles de percepción de la corrupción en los países de América Latina y en otras partes del mundo, nos ubica dentro de los primeros lugares en percepción de la corrupción.
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