Redacción (RT.com).- El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha mantenido este martes una reunión con su homólogo chino, Xi Jinping, en formato de videoconferencia. El diálogo entre ambos líderes tuvo lugar un día después de la toma de posesión de Donald Trump, que se celebró este 20 de enero en Washington.
Al inicio de la reunión, Putin señaló que las conversaciones a principios de año entre él y Xi ya se han convertido en una bonita tradición. Según precisó, están destinadas a sacar conclusiones del trabajo que se hizo durante el anterior período, así como a esbozar nuevos planes para el desarrollo de la asociación integral y la interacción estratégica entre ambos países.
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«Construimos nuestros lazos sobre la base de la amistad, la confianza y el apoyo mutuos, la igualdad y el beneficio recíproco»
«Estos lazos son autosuficientes, independientes de los factores políticos internos y de la actual coyuntura mundial«, afirmó el presidente ruso. Al mismo tiempo, destacó que su cooperación se basa en una amplia gama de «intereses nacionales y una coincidencia de puntos de vista sobre cómo deberían ser las relaciones entre las principales potencias«.
Una cooperación fructífera
Putin considera que 2024 fue un año fructífero para ambos países, que ese mismo año celebraron el 75.º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas. Al rememorar los diferentes eventos y encuentros importantes que tuvieron lugar el año pasado, el mandatario aprovechó la ocasión para agradecer a Xi por su apoyo a la presidencia rusa en el BRICS.
El presidente subrayó que los dos países «coordinan sus pasos» en diversas «plataformas multilaterales«, como en las Naciones Unidas y en su Consejo de Seguridad; en la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS); en el Grupo de los Veinte (G20) y en la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
«Abogamos conjuntamente por la construcción de un orden mundial multipolar más justo y trabajamos para garantizar la seguridad indivisible en el espacio euroasiático y en el mundo en su conjunto», subrayó el líder ruso, haciendo hincapié en que los esfuerzos de Moscú y Pekín «juegan objetivamente un importante papel estabilizador en los asuntos internacionales«.
Vínculos beneficiosos
Al mismo tiempo, Putin explicó que pese a «la influencia negativa desde el exterior», en el 2024 se registró un incremento en el comercio entre ambos países. De acuerdo con sus palabras, durante un período de 11 meses el volumen comercial aumentó más del 7 % y alcanzó más de 220.000 millones de dólares. Las estadísticas chinas calcularon sobre el año entero y obtuvieron la cifra de casi 245.000 millones de dólares.
«La República Popular China es nuestro principal socio comercial y Rusia ocupa con seguridad el quinto lugar en la lista de países que son contrapartes comerciales de China», afirmó Putin, agregando que el país asiático también es el mayor consumidor de recursos energéticos rusos y Rusia ocupa el primer lugar en sus exportadores de petróleo.
También se implementan proyectos conjuntos exitosos en la industria, el transporte, la agricultura y otros sectores, además del fortalecimiento de los lazos humanitarios. «Los flujos contraturísticos y los intercambios deportivos y educativos están aumentando», agregó.
Relaciones llevadas a un nuevo nivel
Sus palabras fueron apoyadas por Xi, quien confirmó que las relaciones entre Moscú y Pekín, cuyo núcleo se basa en «la buena vecindad y amistad«, la interacción estratégica integral y la cooperación mutuamente beneficiosa, «están adquiriendo nueva vitalidad». El líder chino afirmó que actualmente «se mantiene una fuerte tendencia ascendente en el comercio», mientras la ruta oriental del gasoducto China-Rusia se ha puesto en servicio a plena capacidad antes de lo previsto.
El mandatario recordó que este año se cumple «el 80.º aniversario de la victoria del pueblo chino en la Guerra de Resistencia contra la Invasión Japonesa, la victoria de la Unión Soviética en la Gran Guerra Patria y la victoria en la Guerra Mundial Antifascista, así como el 80.º aniversario de la ONU».
«En este contexto, junto con nuestros colegas rusos, apoyaremos el sistema internacional centrado en las Naciones Unidas, defenderemos la victoria en la Segunda Guerra Mundial, obtenida con la sangre y las vidas de millones de personas, y defenderemos los derechos de China y Rusia como países fundadores de la ONU y miembros permanentes del Consejo de Seguridad», declaró.
Asimismo, expresó que Pekín está dispuesto llevar sus relaciones con Rusia a un nuevo nivel en 2025 y a mantener su estabilidad «en nombre del desarrollo y prosperidad de los dos países, la justicia internacional y la igualdad«.
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