A Pleno Sol
En este momento no hay ambiente para una gran concertación nacional. Las pasiones están al rojo vivo. Los partidos opositores están buscando las causas de la derrota, y los oficialistas en ver a donde van el 16 de agosto.
La concertación es necesaria, pero será casi imposible llegar a la misma si el liderazgo partidista no hace un alto en su autodestrucción. Por sí solo, unilateralmente, nadie puede hablar de concertación.
Se necesita una integración masiva, y sobre todo debe darse la armonía y el entendimiento entre los que conforman los tres principales partidos dominicanos. Es en vano hablar de integración si en la mesa faltan los partidos Revolucionario Moderno, de la Liberación Dominicana y la Fuerza del Pueblo.
Hay ya despistados que están iniciando su proyecto político con miras a las elecciones que serán dentro de cuatro años.
Las coyunturas no se dan a largo plazo, sino en el momento propicio, por lo que buscar pura y simple una candidatura presidencial es un esfuerzo perdido.
Dentro de dos años si puede ser el momento ideal, tomando en cuenta que los partidos celebran primarias, y que muchos de los candidatos no son conocidos a nivel nacional. Hablar ahora de candidaturas, es un ejercicio fatuo.
En lo que se debe pensar es si el 16 de agosto se le dará al gobierno la tregua de los cien días. Ese alto al fuego no es obligatorio, pero la política moderna lo demanda. No es hora con un gabinete viejo, que necesita ser remozado, que se fija la tregua, sino en el momento oportuno, que llegará del 16 de agosto en adelante.
Para que haya concertación de un movimiento de unidad nacional, hace falta la tregua política. Nadie va a una mesa de negociaciones si considera que el anfitrión es su enemigo. Tiene que haber desprendimiento de todos los sectores. Es ir a la mesa de diálogo o con una agenda abierta.
¿Qué se puede ir a negociar?. La miseria, sus consecuencias y formas de hacerle frente. Es un tema permanente, sobre el cual todos están conscientes, desde el gobierno hasta la oposición. Los celos no dejan trabajar y buscar la unidad.
El pueblo espera los desprendimientos para que florezca la concertación. Todos deberán sacrificarse, si se quiere ir a buscar la salvación nacional. La unidad deberá prender en las capas bajas, para que llegue con buen pie a la supra estructura.
manuel25f@yahoo.com
(El autor es periodista residente en Santo Domingo, República Dominicana).