Santo Domingo (República Dominicana).- El presidente del Colegio de Abogados de la República Dominicana (CARD), Trajano Potentini, deploró el vejamen, maltrato y desconsideración, al que fue sometido el abogado Richard Ferreiras Segura, de la provincia Bahoruco, por parte de agentes policiales quienes lo agredieron y empujaron, además de vociferar múltiples improperios.
Potentini declaró que en su gestión al frente del CARD no se tolerará irrespeto alguno en contra de la clase jurídica, y mucho menos impedir que un abogado ejerza su labor de defensa a una persona privada de libertad, en un claro abuso de poder pues, el acceso y comunicación entre abogado cliente es parte fundamental del debido proceso de ley, piedra fundamental del bloque de garantías constitucionales.
El presidente del gremio que agrupa los abogados, comisionó a directivos del CARD para asistir y dar seguimiento frente a la policía y en particular a los agresores, «con el objetivo de querellarnos en contra de todos los implicados», e informó que la comisión estará integrada por Julio Cesar Terrero, Lucia Florentino, Wagner Piñeyro, Juan Pérez Roa y Cesáreo González.
Potentini calificó de insólito el tratamiento dado por la policía a un profesional que solo está abogando por el respeto a los derechos fundamentales de un ciudadano privado de libertad, algo muy grave que amerita una sanción ejemplarizadora.
Asimismo, pidió a la Procuraduría General de la República y a la Policía Nacional impedir y detener los atropellos de los que son objeto los abogados en los cuarteles y otras dependencias judiciales, y exigió iniciar una exhaustiva investigación referente al reiterado maltrato que sufren abogados, donde autoridades se toman las justicia en sus manos e impiden el ejercicio del derecho de defensa.
«No nos vamos a detener ante rangos o jerarquía de autoridades, este caso lo llevaremos hasta las últimas consecuencias, rechazando cualquier manejo y tratamiento de paño tibios. Exigiremos consecuencias», manifestó Potentini al adelantar que estará atento y vigilante, ante cualquier asomo de irrespeto a los abogados por parte de cualquier autoridad.
Agregó que en los casos que se determine que se trata de otros abogados investidos de cualquier función, maltratando, serán sometidos al tribunal de honor del colegio para que sean juzgados en el ámbito disciplinario por sus inconductas, incluyendo a los policías del vejamen del que fue objeto, el letrado Richard Ferreiras, en Neyba.